sábado, 22 de enero de 2011

Torre del Oro

Fue levantada en el primer tercio del siglo XIII, en los postreros momentos de los reinos de Taifas. Su nombre en árabe era Borg-al-Azajal, que venía a expresar, que el revestimiento dee azulejería dorada que destellaba al sol era como el oro y se reflejaba en el río dañando la vista.

Abu-1.Ula fue el gobernador almohade que en 1220 la mandó edificar para defender la ciudad. Cerró también la entrada al puerto con una gruesa cadena que cruzaba el río y se sujetaba en otra torre (ya inexistente) en la orilla de Triana. Esta cadena fue la que partieron los marinos de Ramón Bonifaz en 1248 con la flota de la Reconquista.

La leyenda cuenta que la Torre del Oro servía como refugio a las damas que cortejaba el Rey Pedro I el Cruel, cuyo más celebre amorío fue el de doña Aldonza, hermana de doña María Coronel, que vivía aquí, en la Torre del Oro, mientras que su esposa, María de Padilla, habitaba en el Alcázar.

Posteriormente nuestro monumento pasó a ser capilla y prisión. Arquitectónicamente, es de planta dodecagonal. Presenta tres cuerpos: el más elevado circular. El segundo es de ladrillos y de planta hexagonal, posee decoración cerámica en cintas verdes recuadrando los arcos(grata innovación en su época) y en el primero se superponen tres plantas cubiertas con bóvedas de arista.

Con el paso de los años, el abandono se cebó con la Torre. Así llegó al siglo XVI en un ruinoso estado, lo que obligó a realizar una importante obra de consolidación. Gracias a ella, pudo alcanzar el XVIII, en el que, el terrible terremoto de Lisboa(1755) sacudió a la ciudad y afectó gravemente a la Torre.

Fueron momentos críticos para su futura pervivencia, pues aunque en 1760 se arreglaron los daños y se añadió el cuerpo superior, poco antes el asistente Marqués de Monte Realse planteó su demolición para ensanchar el paseo de coches de caballo y a efectos de dejar el paso de San Telmo al Puente de Triana más derecho. La fuerte oposición del pueblo de Sevilla(llegaron hasta el rey) impidió que se cometiera tal destrozo.

Otra posterior amenaza de muerte le vino de manos de la Revolución de 1868, cuyos revolucionarios , que apresuraron la demolición de los lienzos de murallas, las pusieron a la venta para aprovechar sus materiales de derribo. Nuevamente la oposición popular fue la que provocó que la Torre perdurara.

Hoy en día, la Torre del Oro es tan emblemática para Sevilla como las mismísima Giralda. Alberga un Museo Naval que exhibe variados objetos y piezas relacionados con la vida marinera sevillana y es munumento indiscutible y emblemático para la ciudad, a la que otorga extraordinarias vistas desde Los Remedios y Triana.
La Torre del Oro presenta los rasgos propios de un edificio claramente defensivo, dispuesto verticalmente en tres cuerpos:

El cuerpo inferior es un prisma dodecagonal que se extiende hasta los 20,7 ms. de altura y se corona con una galería de almenas y merlones de remate piramidal. Originariamente disponía de muy escasas ventanas, fundamentalmente las saeteras que aparecen en cada una de sus lados y a alturas diversas. Todo este cuerpo inferior, que se divide en tres pisos cubiertos con bóvedas de arista, está construido con sillares de piedra, unidos con mortero de argamasa. Al exterior, bajo las almenas, corren tres molduras paralelas. Entre las dos inferiores se dispone un friso perimetral con parejas de arcos túmidos que alojan ventanas cegadas, enmarcadas por otros arcos de medio punto.
Museo Nacional de Arte Romano
Fue un edificio creado por Rafael Moneo entre los años 1981 y 1986.Uno de los criterios básicos antes de construir el museo fue la conciencia de que el edificio debía responder a la importancia que el tema encerraba, es decir, quería decir que la modestia del medio urbano en el que el museo se levanto quedaría transformada con la presencia de un edificio que, por su misma posición en el trazado de la ciudad, podría ser considerado como anticipación y adelanto del sorprendente espectáculo a que da lugar el esplendido conjunto de ruinas romanas.
El exterior
El edificio aparece como una serie de contrafuertes sesgados que harán evidentes uno de los principios en que se fundó la arquitectura romana: la solidez de las fábricas. Desde el exterior el edificio esta caracterizado por la simplicidad, se muestra poco atractivo, el edificio se asimila a las fabricas de principio del siglo XX.



 Quedan tales espacios iluminados por unas ventanas altas, impidiendo el muro paralelo del que antes hablábamos, que el sol penetre directamente sobre la nave.  Esta fuente de luz indirecta, que baña la importante colección de estatuas romanas que alberga el museo, esta complementada por una iluminación cenital, neutra, que se produce a lo largo de las naves transversales menores. Ventanas a norte garantizan una luz indirecta necesaria para que las lápidas y las inscripciones queden bien iluminadas.
El interior

El interior del museo queda definido por dos cuerpos de edificación separados por la calzada romana y conectada por una potente pasarela que vuela sobre los restos arqueológicos. En uno de los edificios se alberga el museo y sus almacenes, lo que Moneo en la memoria del proyecto llama museo-archivo, y en el otro establece talleres de restauración, biblioteca, salón de actos y dependencias administrativas.
El edificio en planta muestra como tres plantas, la planta que esta debajo del museo  donde esta las ruinas, la calzada representa la Mérida Romana, la planta baja representa la Mérida antigua y la planta de las pasarelas representa la Mérida contemporánea.





 En el edificio llamado museo-archivo  esta dividido por una serie de muros paralelos. El sistema repetitivo de crujías está superpuesto a una retícula de circulación que entraña una jerarquía susceptible de adoptarla el propio visitante. El interior queda por tanto definido por una serie de muros paralelos que dividen el espacio de la nave dotándolo así de un recorrido. Este sistema de muros paralelos se traduce en la fachada sur en un sistema de contrafuertes que evocan la geometría y la solidez del Acueducto de los Milagros.



La apertura de los arcos en los muros paralelos que conforman el espacio de la nave que sugieren al visitante las dimensiones que en su día tuvo la Mérida. Al entrar en la sala los arcos se relacionan con el arco de trajano.




Una serie de corredores y pasarelas da a estas naves la posibilidad de ser ocupadas en altura, a un tiempo que permiten nuevas visiones de la nave central.  La intersección entre el sistema de muros y el sistema de vacios resuelve así la organización en planta del edificio, que podría también entenderse como un gran espacio único, a modo de nave
El hecho de que estos muros mantengan una conexión entre sí a través de un paso hace que la visita pueda ser zigzagueante y que el visitante curioso pueda, con absoluta continuidad, ver todas las collecciones.


Materialidad
 Lo que  conmueve del museo es que todo el material empleado en él procede del mismo yacimiento. . El edificio arranca de la materialidad concreta de un muro de ladrillo romano, con la dilatada constancia de sus hiladas y el uniforme despiece de su aparejo, significa pensar las obras del museo instaladas en el de un modo preciso,  resaltando la blancura del mármol sobre el color rosado de la fábrica de ladrillo, y la finura de su cincelado sobre la rugosidad áspera de la cerámica.

domingo, 2 de enero de 2011

Ikea, "la Bauhaus del presente"


La Bauhaus preparaba a las personas de oficios tradicionales para que se convirtieran en trabajadores industriales y dependiendo de su desarrollo, podrían llegar a ser
arquitectos.

No cabe duda de que el arte y la arquitectura están intrínsecamente relacionados, y quizás es necesaria esta relación del arquitecto con los diferentes oficios artesanales, para adquirir la capacidad de despertar la imaginación , de producir innovaciones en la arquitectura, para que el arquitecto se convierta alguien capaz de construir. El arquitecto relacionado con la actividad artística es el que posee imaginación e inspiración, es alguien creativo, ingenuo, con el don de proyectar.


La enseñanza de los oficios pretende preparar para el diseño de la producción en serie. Comenzando con los instrumentos más simples y con las labores menos complicadas [el aprendiz de la Bauhaus] adquiere gradualmente la capacidad para resolver problemas más intrincados y para trabajar con máquinas, al tiempo que está en contacto con todo el proceso de producción, desde el principio hasta el final, mientras que los obreros de las fábricas nunca van más allá del conocimiento de una de las fases del proceso. Por tanto, la Bauhaus está intentando conscientemente entrar en contacto con empresas industriales existentes, buscando con ello el estímulo mutuo.

Texto publicado con ocasión de la primera exposición de la Bauhaus, celebrada en Weimar en 1923

Uno de los principales propósitos de Gropius era la tipificación de un objeto para producirlo en serie. Para establecer la tipificación se  centraban en la materialidad pues consideraban que esta determina la expresión y la forma. El objetivo ya no era poner de manifiesto la sensibilidad por los constrastes de materiales y formas, montados normalmente como relieves, sino más bien revelar las propiedades estéticas y de las estructuras asimétricas y exentas.
 
Sin embargo, algunos arquitectos de la época no se mostraban de acuerdo con este sistema. Willian Morris rechazaba la producción industrial en las artes decorativas y la arquitectura, y propugnaba un retorno a la artesanía medieval, considerando que los artesanos merecían el rango de artistas. El movimiento de artes y oficios pretendía volver a la manufactura artesanal contrastada con la producción industrial de la época y así hacer llegar la cultura a las áreas menos pudientes de la sociedad. Lo que se le reprochó fue que los productos llegaron a ser tan complejos en su fabricación que solo las clases altas pudieron adquirir los ejemplares.

La opinión de Morris en este sentido, resulta paradójica, pues se produce una contradicción entre lo que él propone y lo que ocurre en la realidad. Parece quizás que la fórmula más acertada para llevar la cultura a personas más carentes sería la de Gropius pues establece una tipificación en la que también se ha tenido en cuenta que el producto sea asequible.

Sin embargo, cada persona tiene unas necesidades, a las que la arquitectura debe responder. No es mejor una tipificación de arquitectura factible para mucha gente, sino la que se ajusta a las necesidades de cada individuo. El mismo Morris definió la arquitectura como el conjunto de modificaciones y alteraciones introducidas en la superficie terrestre con objeto de satisfacer las necesidades humanas.

El sistema seguido por la Bauhaus ha influido muchísimo a generaciones posteriores. Incluso en la actualidad, se pueden apreciar organizaciones similares a la de la Bauhaus. Un claro ejemplo es el de Ikea: todos esos muebles y objetos de estética funcionalista, con formas geométricas básicas que se encajan, no ocupan espacio y son agradables para la vista.

Forman parte de la vida diaria en los hogares de millones de personas en 39 países de cuatro continentes; han cambiado la forma de entender la decoración, la organización del espacio y el mobiliario.

"La forma en que Ikea vende muebles ha influido decisivamente en los últimos treinta años en Europa Occidental", explica  Efe Markus Laumann.
Es posible ver la evolución del diseño de la empresa fundada por Ingvar Kamprad, desde la afición sueca por la madera y las superficies diáfanas a los diseños más internacionales.
En el éxito de Ikea influye que la máquina hizo posible la fabricación masiva y económica de objetos cotidianos.
Así Ikea bebe del movimiento de la Bauhaus  y su apuesta por dar funcionalidad a la estética y aprovechar la producción industrial.
"Bonitos objetos cotidianos. Muebles prácticos y baratos a disposición de la masa", es la fórmula del éxito, resume Laumann.

"No es arte, es un mueble que perdura y, debido a su éxito, es contemplado de una forma artística", explicó Laumann, quien sí concede que algunos de los muebles más vendidos se han convertido en "iconos del diseño democrático, de masas".

Organizaciones como estas contribuyen a la universalidad y a la falta de individualidad, ¿es realmente la tipificación de un objeto capaz de satisfacer la necesidad de cualquier individuo la mejor solución o la más fácil?